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Como cuando andaba en bicicleta por las calles de tierra, con los walkman al mango, preso de mis vicios pares, me sentí una mañana... y me levanté temprano... Y me lo dije... y me lo grité... y me lo tatué para no olvidarlo... Ya no me hacés falta, te dije... y me dije... y no se lo dije a nadie más... porque no hacía falta.
O no había nadie más como para decírselo... O no le interesaba a nadie más porque, de hecho, yo soy mucho mas que eso... O al menos eso creo... Y eso espero que crean...

Si, lo sé, soy insoportable con mis puntos suspensivos... Pero eso es parte de lo que soy, puntos suspensivos... desde hace un BUEN par de años...

Recuerdo... poner en punta el casette con una lapicera, para no agotar las pilas de mi walkman, y salir en la bici a vivir la otra realidad, la que no tenía tan "a mano"... a pensarme siendo parte de esa banda que estaba escuchando... a pensarme que yo había escrito esa letra, o que yo había tocado ese solo... o que estaba en Obras presentando ese disco... o que, simplemente, yo había estado en ese recital...
Y pedaleaba, pedaleaba... queriendo ir lo mas lejos posible pero sin alejarme tanto... Pero, siempre, lejos de mi cuerpo...

Día tras día fui pedaleando un poquito mas lejos, hasta que un día no regresé mas... Y se hizo de noche y no tuve miedo, y ahullaban los lobos y no me inquietaban... Y la luna era llena... y no paraba de mirarla... Y hacía frío, pero no era mayor al que ya había sentido alguna vez... Y me fuí durmiendo de a poco... y me sentí bien, me sentí bien...
Con la mañana vinieron esas mismas palabras de las que hablaba allá arriba, "ya no me hacés falta"... Esas palabras que me repito una y otra vez, cuando las necesito, y que tán necesarias son para que mi motor siga funcionando...
Porque no hacen mas que recordarme que puedo solo, que solo seguí adelante y puedo seguir haciéndolo sin ninguna sustancia, sin ninguna otra cosa que mi cabeza sana y mis ganas de ser yo, lo mejor que pueda, para mi mísmo...

Con el correr del tiempo apareció otra sombra al lado de la mía, y fué maravilloso... Y es maravilloso... Y la extraño cuando no está... Y, a veces, la veo cuando no está... Pero es bueno saber que está cuando está...Y fué ese el momento en el que me dí cuenta de que no solo se trata de ser lo mejor que pueda para mi mismo, porque ya no estoy solo... Y si lo soy para mi mismo, bien puedo compartirlo con quien está conmigo... Y en ese camino voy... Tambaleando, como puedo, de banquina a banquina a veces... Pero voy...

Aún así no creas que no me cuesta... Si! Y mucho! Y no te hablo de drogas ni de nada... No, voy más allá de eso... Ojalá fuera todo tan fácil como deshacerse de una adicción... Y me levanto cada día y me lo repito, y me lo digo y me clavo el cuchillo para que duela... Bien profundo... Y salgo a la calle, después de quitarme la sangre con una buena ducha, e intento hacer de ese día lo mejor posible, o lo mejor que salga... Y de crecer un poquito mas antes de que se oculte el sol...

Si, al fin y al cabo, no podemos hacer mas que eso...